martes, 31 de diciembre de 2013

TE BUSCO VIDA

Te busco vida,
en el sarcasmo burlón
del peregrino,
en la mirada de los albatros
volando sobre las olas altas,
en la barrera insalubre
de barro, que es perecedera

Te busco vida,
en las frenéticas risas
de las mujeres tan bien acompañadas,
y en el tiempo abstracto de creer
haber vivido atolondrado.

LUCIA SERRANO

viernes, 13 de diciembre de 2013

                                              V

      este verdadero poema
no ha sido resuelto aún
pero quiere vivir bajo su forma
      aquí,
como sea

       yo intento atraerlo hacia nosotros
creo poder trasmitir apenas un mote de su espíritu
y en ello dejo buena parte de mis comisuras

       quizá con el tiempo
las estrofas y los versos se resequen
y musiten desde entonces
un sórdido dibujar de su descreimiento

luis alberto spinetta "Guitarra Negra"
(su único libro publicado)

miércoles, 4 de diciembre de 2013

YO QUERIDA
TE AMO, TE AMO, PERO...

Hay algo sórdido entre los pliegues de un corazón rendido.
Hay algo oscuro, de morir, en el amar.
Yo te amo, te amo, pero el alma se vacía de goce.
Yo te amo, te amo, pero el goce se vacía de alma.
Es como cuando por decir escribo un verso.
Le pido nada a nadie y, sin embargo,
hay hombres y pronombres,
hay cosas, la vida, que se pierden.

Es como cuando por las noches mirando las estrellas,
me pregunto: ¿Qué habrá en nosotros de esos soles lejanos?
¿qué habrá, en nosotros, de esa vida?
¿qué vida llevarán, en ellos, de nosotros?
Y, ahí, soy recorrido por un fulgor,
algo de cielo, algo de soles, algo de lejanía.

Yo te amo, te amo, pero en un pozo negro de vergüenza.
Yo te amo, te amo, pero en un pozo negro de soledad.
Un pozo negro donde la muerte todo lo fragmenta.
Yo te amo, te amo, pero te amo en pedazos,
en hilachas, en sobresaltados fantasmas de la noche.
Tus ojos, tu mirada, querida, son aquel color,
tu rabia por gozar, tu desesperación, aquellos suspiros.

Yo te amo, te amo, pero me pierdo en mí,
soy un náufrago de mi propia ternura,
un ser que se quiebra antes de ser.
Yo te amo, te amo, pero...


MIGUEL OSCAR MENASSA Argentina-1940
De “Poemas y cartas a mi amante loca joven poeta psicoanalista”

viernes, 29 de noviembre de 2013

Así es mi vida, 
piedra, 
como tú. Como tú, 
piedra pequeña: 
como tu,
piedra ligera; 
como tú, 
canto que ruedas 
por las calzadas 
y por las veredas; 
como tú, 
guijarro humilde de las carreteras, 
como tú, 
que en días de tormenta 
te hundes en el cieno de la tierra 
y luego 
centelleas 
bajo los cascos 
y bajo las ruedas; 
como tú, 
que no has servido 
para ser ni piedra 
de una lonja, 
ni piedra de una audiencia, 
ni piedra de un palacio, 
ni piedra de una iglesia... 
como tú, piedra aventurera... 
como tú, 
que tal vez estás hecha 
sólo para una honda... 
piedra pequeña 

ligera...


De:Autorretrato


miércoles, 27 de noviembre de 2013

CLAUDIA MASIN

El talismán

Los ojos de los que estamos continuamente al borde de la caída
o del tropiezo, no saben despegarse de la tierra. De qué sirve
una belleza material que no pueda tomarse entre las manos
como una piedra y ser llevada siempre encima del cuerpo
igual que esos objetos insignificantes
que un niño acarrea consigo donde vaya, y que lo hunden
en el terror o el desconcierto si se pierden.
No hay belleza para mí en las cosas
que no pueden volverse talismán contra las fuerzas
del desamparo o de la pena, y ninguna palabra podría hacer eso,
sólo la presencia física de lo que fue elegido por un amor oscuro,
cuyas leyes desconocemos, para preservar nuestra vida intacta
entre todos los peligros y accidentes que la acechan, a pesar
de que es ella, esa presencia amada, el peligro mayor,
porque no puede protegernos de su pérdida.




(De "La plenitud", Hilos, Buenos Aires, 2010.)

domingo, 17 de noviembre de 2013

LOS CABALLOS DE AQUILES

Cuando vieron a Patroclo muerto,
tan fuerte, joven y gallardo,
prorrumpieron en llanto los caballos de Aquiles.

Su naturaleza inmortal se conmovió
al ver la obra de la muerte;
movieron las cabezas, agitaron las crines en el aire
y golpearon la tierra con sus patas.
Lloraban a Patroclo al darse cuenta que estaba sin vida,
su carne inerte,
su alma perdida, sin aliento, salida a la gran nada.

Zeus vio las lágrimas de los inmortales caballos
y se entristeció: "No debí actuar impulsivamente
en la boda de Peleo. No debí regalarlos.
Tristes caballos.

¿Qué tenían que hacer allá,
entre los desdichados humanos, juguetes del destino?
Ustedes, para quienes no existe la muerte ni la vejez,
si algún problema humano los alcanza
caerán también en la desdicha."

Sin embargo, los caballos continúan llorando
por el interminable desastre que es la muerte.

KONSTANTINOS KAVAFISEgipto-1863
De "Deseos y otros poemas"


jueves, 14 de noviembre de 2013

   VIENTOS HURACANADOS

Me acerco al río más ancho del mundo y mientras diviso
lejana la tormenta, vientos huracanados del norte,
mezclan en apariencia todas mis ideas.
Viento de los locos te llaman, porque vas y vienes
en todas direcciones.
Levantas mis vestidos y sospecho la escena de amor contigo,
donde nacen hijos que vuelan hacia el cielo.
Miro a mi alrededorlas hojas caídas,
mueves de los árboles altos, la copa entera y hasta las
raíces deben sentir tus vibraciones.
Camino lentamente gozando al verte danzar tu danza.
Mi cuerpo moviéndose por tu furia, estremece las ansias.
Como un huracán, tiras abajo lo más endeble, lo flojo,
lo que ya no sirve, y te alzas para seguir viajando.
No tienes ningún miedo.
Tu altivez hamaca mis sueños y no quiero verte partir.
Sería capaz de quedarme atada a esa intemperie.
Tierra tenaz donde sospechan los visitantes.
Geografía que das vuelta al vacío de las formas sobre la rivera.
Se alegran las aguas cuando te acercas, ciego, exacto,
soberbio sobre las superficies.
Vientos huracanados, siembras en mis alrededores tu explosiva
carga húmeda, tu niebla, tu oleaje implacable.
Mientras tanto, aguardo las voces que vendrán con la tormenta,
y negras alturas no te detendrán.
A todo lo llevas por delante viento, el humo de algún
pastisal recién prendido, se aviva con tu brisa,
y el paraíso es ese tiempo sin derrotas.
Con el último rayo de luz, celebro el crepitar de tu transparencia,
muevo mis cabellos con el aire que amontonas,
y quiero que termines esta danza macabra,
para volver a casa y mirar a lo lejos las distancias.                                          61
Ni siquiera recogí una palabra.
Sombras donde los pájaros ya no están.
Secretos del viento conversando conmigo en esta tarde gris,
para que los hombres levanten su cansancio.
Adonde llegarán las huellas lejanas que te acompañan
Hasta el río me pertenece cuando llegan los huracanados
vientos del norte sobre mi piel felina.
Una frescura de mar desciende empecinadamente
sobre el asfalto, arremolina lo muerto.
Esta noche, no existirá en el bosque, será toda del viento.
Despiertan los recuerdos, y es este aire de silencios,
leve caricia detenida.
Vuelve, que asombraremos al miedo de los débiles,
y alguna gaviota volará nuestro cielo.
Alborotado decir del balanceo, entras al corazón,
para devolverle al viento tus palabras,
sosteniendo el desamparo del aire fresco.
Vientos que hablan conmigo.
Vientos del silencio.
Vientos de luz.
Extraña terquedad de los huracanados vientos.
Hoy no levantaré las velas,
aguardaré en la amarra tus ensueños.

LUCIA SERRANO (del libro "CARAMELO" - 2013)





jueves, 7 de noviembre de 2013

CHARLES BUKOWSKI


NADIE SINO TÚ

nadie puede salvarte sino
tú mismo.
te verás una y otra vez
en situaciones
casi imposibles.
intentarán una y otra vez
por medio de subterfugios, engaños o
por la fuerza
que renuncies, te des por vencido y/o mueras quedamente
por dentro.
nadie puede salvarte sino
tú mismo
y será muy fácil desfallecer,
pero que muy fácil,
pero no desfallezcas, no, no.
limítate a mirarlos.
escúchalos.
¿quieres ser así?
¿un ser sin cara, sin mente,
sin corazón?
¿quieres experimentar
la muerte antes de la muerte?
nadie puede salvarte sino
tú mismo
y mereces salvarte.
no es una guerra fácil de ganar
pero si algo merece la pena ganar,
es esto.
piénsalo.
piensa en salvarte a ti mismo.
tu parte espiritual.
la parte de tus entrañas.
tu parte mágica y ebria.
sálvala.
no te unas a los muertos de espíritu.
manténte
con buen talante y garbo
y al cabo,
si fuera necesario,
apuesta tu vida en plena refriega,
al carajo las probabilidades, al carajo
el precio.
nadie puede salvarte sino
tú mismo.
¡hazlo! ¡sálvate!
entonces sabrás exactamente de
qué hablo.

lunes, 28 de octubre de 2013

SIN CUERPO


Crecieron los geranios,
las cañas llegaron altas,
los jazmines todos,
florecieron a mis espaldas.
Dejaba entrar a cualquier forajido,
por el ansia de conocer la asfixia
que lo acompañaba.
Honda penumbra.
Voluptuoso follaje.
Sueños infantiles.
Amanecer sin cuerpo,
era ser fiel a ese destino.
Devuélvanme los días tibios,
el arco, la flecha,
y los gestos cariñosos
de los enemigos.
Cautiva en este universo,
no tengo fe.
Aguardo el banquete final,
donde no será necesaria mi presencia.
Iré sin cuerpo,
probaré el aroma de los cautiverios.

LUCIA SERRANO (del último libro "CARAMELO")
Editorial Grupo Cero - Madrid 2013



domingo, 13 de octubre de 2013

CESAR MORO

El mundo ilustrado

Igual que tu ventana que no existe
Como una sombra de mano en un instrumento fantasma
Igual que las venas y el recorrido intenso de tu sangre
Con la misma igualdad con la continuidad preciosa que me
asegura idealmente tu existencia
A una distancia
A la distancia
A pesar de la distancia
Con tu frente y tu rostro
Y toda tu presencia sin cerrar los ojos
Y el paisaje que brota de tu presencia cuando la ciudad no
era no podía ser sino el reflejo inútil de tu presencia de
hecatombe
Para mejor mojar las plumas de las aves
Cae esta lluvia de muy alto
Y me encierra dentro de ti a mí solo
Dentro y lejos de ti
Como un camino que se pierde en otro continente



César Moro. Seudónimo de Alfredo Quíspez Asín, poeta y pintor peruano nacido en Lima en 1903. En 1925 viajó a París donde se adhirió al movimiento de André Breton, participando activamente en la publicación Surréalisme au Service de la Révolution.

martes, 3 de septiembre de 2013

LA CALLE


Es una calle larga y silenciosa. 
Ando en tinieblas y tropiezo y caigo 
y me levanto y piso con pies ciegos
las piedras mudas y las hojas secas
y alguien detrás de mí también las pisa:
si me detengo, se detiene;
si corro, corre. Vuelvo el rostro: nadie.
Todo está oscuro y sin salida,
y doy vueltas y vueltas en esquinas
que dan siempre a la calle
donde nadie me espera ni me sigue,
donde yo sigo a un hombre que tropieza
y se levanta y dice al verme: nadie.


OCTAVIO PAZ

jueves, 29 de agosto de 2013

UNA CERTEZA EXTRAÑA

Con tus tibias caricias en mi cuerpo, emprendo la marcha
esta mañana.
Camino mi vida recordando tiempos inmortales y sutil co-
mo un huésped en medio de la intemperie, observo el silencio.
Dejo los ojos abiertos, para no ver el mundo que sucede.
Ignorando todas las nostalgias, aumenta mi osadía, llegan-
do al interior de la mudez, indiferente y ajena para despistarla.
Este amor que te tengo, me desnuda el alma.
Quiero susurros de las noches amadas y signos para al-
canzarlas.
Suspendida cualquier sospecha, vuelvo a recordar que te amo
y como un guerrero en medio del desierto, espero sabiendo
que pasará la caravana.
Ya llegará el día donde todos soporten vernos juntos. Al-
cancemos la altanería de un amor perfecto, sin despedidas.
Si nos olvidamos no habrá oraciones que alcancen la calma.
Una certeza extraña que el amor posee, sin poder explicar-
la, supone que es posible y yo amo la ilusión que no tiene
amenazas.


LUCIA SERRANO (del libro “Blues para la Corona” 

lunes, 19 de agosto de 2013

FEDERICO GARCÍA LORCA





Nuestro homenaje en el aniversario de su fallecimiento.

Nace el 5 de junio de 1898, en Fuente Vaqueros, Granada, España. Muere el 19 de agosto de 1936, en Granada, España.

Poeta, dramaturgo y prosista español, integrante de la Generación del 27 y el escritor más popular e influyente de la literatura española del siglo XX.

En la poesía de Federico García Lorca se alían de manera maravillosa todos los elementos de la poesía y del alma de los españoles. Es el poeta de la imagen fresca y original, de la sugerencia, del verso musical y lleno de calidez y luces interiores.

Algunas de sus célebres frases:
* La poesía no quiere adeptos,quiere amantes.

* Pero el dos no ha sido nunca un número porque es una angustia y su sombra.

* Como no me he preocupado de nacer, no me preocupo de morir.

* Desechad tristezas y melancolías. La vida es amable, tiene pocos días y tan sólo ahora la hemos de gozar.

domingo, 2 de junio de 2013

CANCION DE LA INFANCIA

Cuando el niño era niño
caminaba balanceando los brazos,
quería que el arroyo fuera un río,
que el río fuese un torrente
y que ese charco fuera el mar.
Cuando el niño era niño
no sabía que era niño,
para él todo estaba animado
y todas las almas eran una.
Cuando el niño era niño
no tenía una opinión de nada,
no tenía costumbres,
se sentaba a menudo con las piernas cruzadas
o salía corriendo,
tenía un remolino en el pelo
y no hacía caras cuando lo fotografiaban.
Cuando el niño era niño
era el tiempo de preguntar:
¿Por qué soy yo y no tú?
¿Por qué estoy aquí y no allá?
¿Cuándo comenzó el tiempo y dónde termina el espacio?
¿La vida bajo el sol no es sólo un sueño?
Lo que veo, oigo y huelo ¿no es acaso
una ilusión del mundo ante el mundo?
¿Existen realmente el mal
y la gente mala de verdad?
¿Cómo es posible que yo, el que soy,
no existiera antes de nacer
y que un día yo, el que soy,
no seré más este que soy?
.
Cuando el niño era niño,
no pasaba las espinacas, las arvejas,el arroz con leche, la coliflor,ahora come todo eso, y no sólo porque debe.
.
 Cuando el niño era niño
una vez despertó en una cama desconocida,
y ahora lo hace una y otra vez.
Entonces mucha gente le parecía hermosa,
ahora sólo unos pocos, y con suerte.
Tenía una imagen clara del Paraíso,
ahora, a lo sumo puede adivinar,
no concebía la nada,
y hoy tiembla ante la sola idea.
 
Cuando el niño era niño
jugaba con entusiasmo,
y ahora se emociona como entonces
pero sólo con el trabajo.
 
Cuando el niño era niño
era suficiente comer una manzana, …pan.
Y aún ahora lo es.
 
Cuando el niño era niño
las moras le caían en las manos
como sólo las moras pueden hacerlo,
y así es hasta hoy.
Las nueces le ponían áspera la lengua
y aún lo hacen,
tenía, en cada montaña,
el anhelo de una montaña más alta
y en cada ciudad,
el anhelo de una ciudad mayor,
y todavía es así,
arrancaba las cerezas de las ramas más altas
con una euforia que siente todavía,
tenía cierta aversión a los extraños
que todavía conserva
y esperaba la primera nevada
como la espera hoy.
 
Cuando el niño era niño
arrojó un palo contra un árbol como una lanza


y allí está temblando todavía.

PETER HANDKE

martes, 28 de mayo de 2013

LA POESIA

¿Por qué tocas mi pecho nuevamente? 
Llegas, silenciosa, secreta, armada, 
tal los guerreros a una ciudad dormida; 
quemas mi lengua con tus labios, pulpo, 
y despiertas los furores, los goces, 
y esta angustia sin fin 
que enciende lo que toca 
y engendra en cada cosa 
una avidez sombría. 

El mundo cede y se desploma 
como metal al fuego. 
Entre mis ruinas me levanto, 
solo, desnudo, despojado, 
sobre la roca inmensa del silencio, 
como un solitario combatiente 
contra invisibles huestes. 

Verdad abrasadora, 
¿a qué me empujas? 
No quiero tu verdad, 
tu insensata pregunta. 
¿A qué esta lucha estéril? 
No es el hombre criatura capaz de contenerte, 
avidez que sólo en la sed se sacia, 
llama que todos los labios consume, 
espíritu que no vive en ninguna forma 
mas hace arder todas las formas 
con un secreto fuego indestructible. 

Pero insistes, lágrima escarnecida, 
y alzas en mí tu imperio desolado. 

Subes desde lo más hondo de mí, 
desde el centro innombrable de mi ser, 
ejército, marea. 
Creces, tu sed me ahoga, 
expulsando, tiránica, 
aquello que no cede 
a tu espada frenética. 
Ya sólo tú me habitas, 
tú, sin nombre, furiosa sustancia, 
avidez subterránea, delirante. 

Golpean mi pecho tus fantasmas, 
despiertas a mi tacto, 
hielas mi frente 
y haces proféticos mis ojos. 

Percibo el mundo y te toco, 
sustancia intocable, 
unidad de mi alma y de mi cuerpo, 
y contemplo el combate que combato 
y mis bodas de tierra. 

Nublan mis ojos imágenes opuestas, 
y a las mismas imágenes 
otras, más profundas, las niegan, 
ardiente balbuceo, 
aguas que anega un agua más oculta y densa. 
En su húmeda tiniebla vida y muerte, 
quietud y movimiento, son lo mismo. 

Insiste, vencedora, 
porque tan sólo existo porque existes, 
y mi boca y mi lengua se formaron 
para decir tan sólo tu existencia 
y tus secretas sílabas, palabra 
impalpable y despótica, 
sustancia de mi alma. 

Eres tan sólo un sueño, 
pero en ti sueña el mundo 
y su mudez habla con tus palabras. 
Rozo al tocar tu pecho 
la eléctrica frontera de la vida, 
la tiniebla de sangre 
donde pacta la boca cruel y enamorada, 
ávida aún de destruir lo que ama 
y revivir lo que destruye, 
con el mundo, impasible 
y siempre idéntico a sí mismo, 
porque no se detiene en ninguna forma 
ni se demora sobre lo que engendra. 

Llévame, solitaria, 
llévame entre los sueños, 
llévame, madre mía, 
despiértame del todo, 
hazme soñar tu sueño, 
unta mis ojos con aceite, 
para que al conocerte me conozca.

Lee todo en: La poesía - Poemas de Octavio Paz http://www.poemas-del-alma.com/la-poesia.htm#ixzz2UZMWueAC